El otoño rara vez se presenta de manera abrupta. Llega insinuándose, con tardes más suaves y noches que invitan a abrir botellas que combinan frescura con mayor profundidad. En esa transición, lo que se sirve en la copa puede ser tan importante como lo que se sirve en el plato: vinos que retienen la energía del verano, pero que al mismo tiempo anticipan el recogimiento y la intensidad del otoño. En este umbral entre estaciones, cuatro propuestas europeas —tres toscanas y una del Douro portugués— se convierten en aliados perfectos para acompañar la temporada.

Cecchi Chianti Classico “Storia di Famiglia” 2023 · DOCG

Hablar de la Toscana es hablar de Sangiovese, y el Chianti Classico es quizá su mejor embajador. La bodega Cecchi, con su “Storia di Famiglia”, ofrece un tinto de profundo color rubí y complejidad aromática: frutos rojos, especias y un delicado aroma de romero que recuerda al paisaje mediterráneo. En boca es suave, con taninos vibrantes y una frescura que sostiene su estructura, dejando un final persistente y elegante.
Es un vino que se presta tanto a una pasta con ragú como a un pollo asado con hierbas, e incluso a una tabla de quesos semicurados. Tradición y modernidad se encuentran aquí en equilibrio, demostrando por qué el Chianti sigue siendo un clásico indiscutible para esta época del año.

Casadei Sogno Mediterraneo 2021 · Toscana IGT

La Toscana también sabe soñar más allá de lo clásico. El Sogno Mediterraneo de Casadei —un ensamblaje de Syrah, Grenache y Mourvèdre— es un vino biodinámico que mira al Mediterráneo como territorio de inspiración. Con aromas intensos de moras, grosellas, chocolate oscuro y tabaco, despliega en boca potencia y suavidad a la vez, gracias a sus taninos dulces y un final largo y especiado.
Es el vino que pide platos más contundentes: cordero asado, carnes a la parrilla, guisos que llenan la casa de aromas. Representa la cara más intensa y contemporánea de la Toscana, un puente entre el sol mediterráneo y la complejidad del otoño.

Quinta Nova Reserva Terroir 2023 · Douro

Desde Portugal, el Douro aporta una visión distinta de esta mesa otoñal. El Reserva Terroir de Quinta Nova es un ensamblaje de Touriga Franca, Touriga Nacional, Tinta Roriz y Tinto Cão que conjuga elegancia y frescura. Su color intenso anuncia un vino de carácter, mientras que en nariz y boca revela fruta madura, notas especiadas y una estructura vibrante, con un final largo y profundo.
Es un vino que habla del paisaje dramático de las terrazas del Douro y que se convierte en compañero ideal para carnes rojas, guisos lentos o incluso para disfrutar en solitario durante una velada más contemplativa.

Litorale Vermentino 2024 · Maremma Toscana DOC

Si el verano tuviera un eco en otoño, probablemente sonaría como este Vermentino orgánico de Val delle Rose. Su color pálido con destellos verdes anuncia frescura, mientras que en nariz se despliegan notas de manzana verde, flores amarillas y un sutil toque cítrico. En boca sorprende por su equilibrio: buena acidez, textura ligera y un final salino y mineral que evoca la brisa marina de la costa toscana. Ideal para prolongar el recuerdo de las comidas al aire libre, acompaña con soltura mariscos, ceviches o ensaladas de temporada. Es el vino que abre la mesa, refrescante y vibrante, pero con la persistencia suficiente para anunciar que estamos en otra estación.

La mesa de la temporada

El cambio de estación es también un cambio de paladar. Estos cuatro vinos europeos nos recuerdan que no hay una única forma de celebrar el otoño: desde la frescura marina de un Vermentino hasta la densidad elegante de un Douro, pasando por la tradición del Chianti y la innovación mediterránea de Casadei. En la copa, como en la vida, la transición se disfruta mejor con diversidad, carácter y un toque de estilo.